Publicado por: @Melissa Ruiz el 05/13/2015
despecho

Algo en lo que concuerdan todas las personas que han experimentado el despecho, es que cuando se está en medio de semejante sufrimiento, la sensación es que jamás desaparecerá y que ya no volveremos a ser los mismos. Probablemente no seamos las mismas personas, pero si lo vemos por el lado positivo (como debería ser siempre), todo eso es experiencia que nos puede servir para no cometer los mismos errores en el futuro, y eso es una ganancia muy grande.

Si es tu caso, de estar pasando por uno de esos despechos tan dolorosos y molestos, lo primero que debes saber es que sí tiene un final y no depende de nadie más que de ti, terminar con el sufrimiento. Lo que hay que saber, es que no hay que caer en un error común, y es el de evitar llorar o vivir el despecho. Si bien hay que buscar salir de ese estado, no es lo mismo huir de todo lo que nos produce el mismo.

Así como buscamos disfrutar de una buena noticia o algo que nos emociona, también hay que disfrutar de los sentimientos tristes. Como? dejándolos salir, pues todo aquello que nos guardamos nos hacen 20 veces más daño, que si lo liberamos y empezamos a superarlo. Así es que si quieres llorar, encerrarte en tu habitación un par de días, perder contacto con el mundo y no dar muchas explicaciones, hazlo, está muy bien y necesitas sacarlo del sistema. Eso sí, olvídate de quedarte a vivir en ese estado con la excusa de tener que sacarlo, porque siempre hay límites y entre más tiempo te demores, puedes incluso empeorar.

Necesitas dejar de consentir el despecho, y concentrarte solo en ti. Esto es que busques apoyo en tus amigos y familia, pues casi siempre cuando se está tan involucrado en una relación, se tiende a alejar a las amistades y dejamos de ir a los planes familiares. Rescata esto! y verás como te hace de bien ir a un almuerzo con tus seres queridos, ir a cine con tus amigos, salir a bailar, y en lo posible pedirle a tus amigos que te mantengan ocupada.

Trata de ponerle una trampa a las pequeñas cosas que te hacen daño. Por ejemplo, escuchar canciones románticas, tristes y que te recuerdan a tu ex pareja, te puede hundir mucho más en un estado de depresión. Trata de voltear la situación y hazte una playlist o lista de reproducción, con canciones alegres o que solían levantarte el ánimo. Reprodúcela todos los días y de a poco estarás cantando y recordando otros momentos que no tiene que ver con esa persona.

Acuérdate de todo lo que dejaste de hacer por complacer a tu pareja, ya que es momento de recuperarte, empieza a hacer todo lo que te gusta a ti. Esas horas de gimnasio o de practicar tu deporte favorito, incluso las películas que no podías ver con tu pareja, es momento de verlas todas y repetirlas! Inscríbete en un curso de alguna manualidad si es que te llama la atención, compra algunos libros de los temas que te interesan, visita museos o busca que eventos hay en tu ciudad y que jamás harías pensado en asistir.

En medio del sentimiento de frustración, tristeza y de sentir que mueres, despierta la vida que hay en ti reconstruyendo la autoconfianza, la belleza física que tienes, las motivaciones para cumplir tus sueños y a darle la bienvenida a posibles nuevas personas que te pueden hacer muy feliz en un futuro.