Publicado por: @Melissa Ruiz el 02/12/2015
SanValentin

Con una fecha tan importante encima no se puede simplemente ignorar que es todo un día. Peor aún cuando todo el mes anterior o las semanas previas las calles y el comercio en general se inundan de publicidad alusiva, posibles regalos para ella o él, descuentos en planes, restaurantes y mil cosas más que te recuerdan la importancia de este día.

Está bien si tienes pareja, porque las ideas para pasar un día genial sobran, pero y si estas sin pareja? solo o sola y de inmediato te imaginas el desastre que será San Valentín? Te ayudamos un poco con ese asunto.

Primero debes tener muy claro que tu estado civil o tu estatus no te define. Ya que tu eres muchas cosas y tu personalidad te permite una variedad de posibilidades, solo te queda recordarlas un poquito y aprovecharlas! Por ejemplo, piensa en tus amigos, que no todos deben estar en pareja o no todos deben tener un plana claro para ese día. Muchos aún cuando tienen pareja no celebran San Valentín y no tienen problema en hacer un plan con otras personas.

Tal vez tu caso es de despecho, hace poco tiempo has terminado tu relación y te sientes más miserable que nunca. Es normal, pero no vivas cada día para ello, necesitas tener paciencia contigo misma, vivir el dolor pero no alimentarte de este. Lo que te mereces es consentirte, prestarle más atención a las cosas que te gustan a ti y aprovechar la fecha para hacer todo que tu prefieras. Que importa si lo haces sola? no es como si llevaras un letrero en la frente que grita a todo el mundo tu condición de soltería. Disfruta un café, un helado, ir de compras, probarte ropa y zapatos, lo que sea que mantenga tu mente ocupada.

Si debes trabajar ese día o estudiar, vive tu día normal y al llegar a casa date un baño relajante, largo, cálido con exfoliantes y jabones de ricos olores. Puedes ir a la peluquería y peinarte diferentes o aunque te hagas lo de siempre, te sentirás bella, arreglada y feliz. recuerda que lo haces por ti, no por buscar aprobación de los demás, así que aunque estés divinamente arreglada y vayas a tu casa no es desperdicio, eres tu quien vive como te ves y como te sientes.

No tomes el día de San Valentín como una prueba a superar, si no como una buena excusa para empezar a prestarte más atención a ti misma, a superar esas relaciones dolorosas del pasado, a centrarte en tus sueños, tus planes y lo que te hace a ti verdaderamente feliz para ponerlo en practica desde ya.