Así como la moda va cambiando y también vuelve, retoma prendas de décadas anteriores y se reinventa, también podemos decir que durante la adolescencia se sufren cambios de todo tipo, se toman cosas de otros, se desechan ideas y se toman nuevas. Sea cual sea tu tipo de personalidad, queremos contarte cuales son las prendas que debes tener, y que puedes modificar un poco para darle ese toque de tu personalidad.
La primera opción nos encanta, y se trata de la famosa camisa de cuadros. Lo increíble de esta pieza es que ella sola puede usarse de varias formas y alguna será de tu gusto. Combinarla con unos jeans es la opción obvia, se ve súper bien, abierta y con un top debajo de un solo fondo que sea de algún color compatible con la camisa. También la puedes llevar cerrada y dentro de una falda amplia y corta con unos botines y un sombrero. Unos leggins negros y unas botas de amarrar, perfectas con la camisa de cuadros abierta, o si te vas un poco más atrevida, la amarras de las puntas y quedará ombliguera. Los accesorios y demás prendas cerrarán tu toque personal.
El pantalón negro es obligado. Ya debes tener en cuenta tu tipo de figura, si eres muy delgada o tiendes a ser gordita, si tienes las piernas muy cortas o por el contrario eres alta. Para cualquier situación, analiza si te queda mejor una bota ancha o ceñido al cuerpo, en una tela fina y más formal si es tu estilo, o en forma de jeans o leggins de buena calidad que tienen más opciones. Esta prenda queda bien a toda hora, en cualquier ocasión y para cualquier plan, lo puedes vestir casual y con un pequeño giro verte más formal. Aprovecha su versatilidad!
Definitivamente a veces es necesario inspirar algo de romanticismo, ya sea porque es nuestro estilo o por si tienes una cita con tu pareja. Una prenda con encajes o broderie, resulta muy delicada, femenina y romántica. No tiene que ser exagerado, puede ser parte de un top o lo hemos visto en los shorts de tela con el encaje encima del mismo tono. El blanco, negro, rosa o tonos pasteles son las mejores opciones.
Las faldas. Aquí se puede ser un poco más libre, pero siempre teniendo en cuenta tu edad y tu figura. Olvídate de meterte en una mini falda súper ajustada si tienes caderas muy anchas. Recurre a una falda acampanada a la altura de la rodilla o más corta, que enseña algo tus piernas y esconde otras cositas. Una falda larga con la combinación perfecta te hará ver muy bien, súmale unos tacones y listo. También para verte más casual, ponte unos tenis y cambias la actitud total del outfit.
Una prenda personalizada sin duda dice mucho de quien eres. Que tal optar por una chaqueta de jean que ya no uses mucho? o que tal vez si uses pero que sería buena idea renovar, poniéndole algunos taches si eres de onda rockera, o un aplique de encaje en un lado, un parche que te guste, algún desgaste o roto. También piensa en teñirla de un nuevo color. Las opciones son muchas, pero una prenda que tu renueves con tu toque personal definitivamente es obligatoria en tu armario.
Recuerda que el 2015 viene fuerte con los estampados geométricos, y si no son de tu gusto apuéstale a las flores, a los mensajes inspiradores o de estilo vintage que todavía se usan mucho.
Siempre un blazer o varios pueden ser tus mejores amigos. Combina colores, un par neutros y uno colorido y salvarán tu repertorio de prendas para todo el año.
Los pañuelos, bufandas o trapos pueden ser los mejores aliados a la hora de formar un atuendo. Pueden cambiar totalmente uno de casual a formal, darle todo el color a un outfit monocromático u ocultar defectitos y otras prendas que no nos hacen muy felices. Siempre ten a la mano alguno.