Publicado por: @Melissa Ruiz el 08/27/2018
HigieneFemenina

No en vano las mujeres dedican mucho tiempo a si mismas, porque el verse bellas o tener el look que quieren no es tarea sencilla. Con la cantidad de productos que existen hoy en día casi que es imposible usarlos todos o encontrarles una ocasión para probarlos, pero con el tiempo se van definiendo los gustos, las tendencias influyen y se va construyendo un estilo personal marcado.

Sin embargo, hay asuntos del cuerpo femenino que no giran en torno a la belleza, la moda o las tendencias, sino a la salud. No es tan fácil estar pendientes de cada cosa que pasa en su cuerpo, porque es diferente al cuerpo y el organismo de los hombres, así que una atención detallada es necesaria.

La zona íntima de la mujer es delicada y aunque se trate de mantener cuidada, hay veces en las que se pierden detalles o se pasan por alto ciertas cosas que desencadenan problemas. Para asegurar la salud y el correcto funcionamiento de esta zona tan especial y valiosa sigue estos consejos.

No es necesario lavarte dos, tres o más veces al día, mientras en tu baño regular hagas una correcta limpieza está bien. Ahora, si sientes la necesidad, límpiala en su exterior solamente con agua. Algunas mujeres dicen que las duchas vaginales y jabones especiales son dañinos, otras los prefieren. Lo cierto es que necesitas consultar a tu doctor antes de probar algún producto, pues muchas mujeres se sienten más cómodas usando jabones femeninos, o aquellos que son neutros, ya que no deben interferir con el PH ni su balance al interior de la vagina.

El uso de los protectores diarios es mejor dejarlos solo para los días de menstruación, o si se está bajo tratamiento de óvulos, pero para usarlos diariamente, no es aconsejable. Su uso no permite la correcta ventilación de la zona, por lo que puede acumularse humedad y es cuando llegan las infecciones.

El uso de tampones está bien, ya en el mercado hay de varias marcas aprobadas por los ginecólogos, pero eso sí, debes cambiarte varias veces al día y limpiar tu zona con una toallita húmeda neutra. No permanezcas demasiado tiempo con el tampón puesto ya que tu zona íntima necesita estar libre y aireada.

La ropa interior es fundamental. Entre más pequeña y apretada, menos aire va a tener tu zona íntima, las infecciones duplican sus posibilidades de aparecer en un ambiente húmedo, que no tiene ventilación, por lo que debes fijarte también en los materiales. Evita telas que acumulen sudor y humedad, por eso prefiere el algodón.

Al usar traje de baño, debes quitarlo una vez está mojado, ya que es el ambiente perfecto para que aparezcan hongos y bacterias.